A finales de 1992 él estaba muy enfermo
A las 4 de la mañana viejas fotografías de Lisa
A lo mejor estaba borracho pero vi
a mover mis manos entre el algodón de las nubes
A través de los ventanales de un restaurante
A veces sueño que Mario Santiago
Admirables troyanos En la veteranía de la peste
Admiras al poeta de nervios duros ¿De acuerdo?
Ahora paseas solitario por los muelles
Ahora te deslizas hacia el plan
Al personaje le queda la aventura
AMANECER NUBLADO. Sentado en el sillón
Aparecen a esta hora aquellos amaneceres del D.F.
Aquella que parpadea fronteras se llama Destino
Así, no es de extrañar la profusión de carteles en el cuarto del autor
Atiende esto, hijo mío: las bombas caían
AUTORRETRATO A LOS VEINTE AÑOS
Bajo el cielo gris — pero nada es permanente
Bien bellos son los pájaros que a las doce de la noche cantan
Buenas noches córnea buenas noches
Cae la calesa y la cadera por el hueco de la eternidad
Ciudades nuevas con parques y juegos infantiles
Colinas sombreadas más allá de tus sueños
Como era pigmeo y amarillo y de facciones agradables
Como quien hurga en un brasero apagado
Conocí a una muchacha que se llamaba
Contra ti he intentado irme alejarme
Créeme, estoy en el centro de mi habitación
Cuando piense en gente hecha mierda diariamente
Dársenas Todo espíritu maligno anima
De Chile sólo recuerdo una niña de 12 años
De este lado del río todo lo que te interesa mantiene la misma mecánica
De sillas, de atardeceres extra
Demos gracias por nuestra pobreza, dijo el tipo vestido con harapos
Dentro de mil años no quedará nada
Detective abrumado... Ciudades extranjeras
Dice el saltimbanqui de las Ramblas
DINO CAMPANA REVISA SU BIOGRAFÍA EN EL PSIQUIÁTRICO DE CASTEL PULCI
Dos cuerpos dentro de un saco de dormir
Duerme abismo mío, los reflejos dirán
Edad media de las cabelleras que el viento esquiva
El autor suspende su trabajo en el cuarto oscuro
El desaliento y la angustia consumen mi corazón
El gato que ayer me era simpático
El otoño en Gerona: la Escuela de Bellas Artes
El pandillero de 20 años, charnego, el cortaplumas en
El paraíso, por momentos, aparece en la concepción general del caleidoscopio
El trigrama inferior es Chen, lo excitante. Su movimiento es hacia
EL ÚLTIMO CANTO DE AMOR DE PEDRO J. LASTARRIA, ALIAS «EL CHORITO»
Él venía de una semana de trabajo en el campo
En aquel tiempo yo tenía veinte años
En casi todo unidos pero más que todo
En el borde de una cama de latón
En el camino de los perros mi alma encontró
En el fondo de un extraño corral
En este poema los artilleros están juntos
En hoteles como el interior de un perro de laboratorio
EN LA SALA DE LECTURAS DEL INFIERNO
En mis trabajos la práctica se decanta como causa y efecto
En realidad el que tiene más miedo soy yo
En un poema, «Imágenes detenidas», ¿por qué el chileno es el único turista a esa hora?
En una hojita de 5x10 cm. dibujaste algunas islas
Es de noche y estoy en la zona alta
Es 1976 y la Revolución ha sido derrotada
Escribe el sexo rojo atravesado por palmeras grises
Escribe sobre las viudas las abandonadas
Escribir plegarias que musitarás
Esperas que desaparezca la angustia
Estaba conversando con Archibald MacLeish en el bar «Los Marinos»
«Esto podría ser el infierno para mí»
Estos aromas son mi tienda de campaña, dije
Éstos son los rostros romanos del Infierno
Estoy en un bar y alguien se llama Soni
Extraño maniquí de una tienda del Metro
Extraño mundo amoroso: suicidios y asesinatos
Fin del mundo o cataratas en los ojos azules que recorren
FRITZ LEIBER RELEE ALGUNOS DE SUS CUENTOS
Fui feliz durante las cacerías
Guiraut Sentado en el patio de la taberna
Hace 16 años que Ted Berrigan publicó
Han cerrado la zona. A esta hora
Hay una enfermedad secreta llamada Lisa
Hermosos instantes sin memoria
Iba caminando, sudado y con el pelo pegado
Imagino a veces un dormitorio en penumbras
Intentaré olvidar Un cuerpo que apareció durante la nevada
Kürnberger. Cuando por los reinos
La Belleza. Tema de composición
La desconocida está tirada en la cama
La muerte también tiene unos sistemas de claridad
La navaja en el cuello y la voz
La pantalla atravesada por franjas se abre
La pesadilla empieza por allí, en ese punto
La primavera abre los párpados
La sangre coagulada en un vidrio horizontal
La situación real: estaba solo en mi casa
Las dos de la noche y la pantalla blanca
Las noches que he dormido entre rostros y palabras
Las nubes se bifurcan. Lo oscuro
Las persianas dejan pasar, apenas, dos rayos de luna
Llegará el día en que desde la calle te llamarán
Llueve y tú dices es como si las nubes
Lo que hay detrás cuando hay algo detrás
Los detectives perdidos en la ciudad oscura
Luz que vi en los amaneceres de México D.F.
Malherido en un bar que podía ser o podía no ser mi victoria
MAÑANA DE DOMINGO. La Rambla está vacía
Me dejé ir, lo tomé en marcha y no supe nunca
Me he criado al lado de puritanos revolucionarios
Me lavo los dientes, la cara, los brazos, el cuello, las orejas
Mi poesía temporada de verano 1980
MI VIDA EN LOS TUBOS DE SUPERVIVENCIA
Mis trabajos literarios 10 abril 1980. Obsesionado
Nací en Chile en 1953 y viví en varias
Nada quedará de nuestros corazones
Nadie te manda cartas ahora Debajo del faro
NO COMPONER POEMAS SINO ORACIONES
No enfermarse nunca Perder todas las batallas
No es de extrañar que el autor pasee desnudo por el centro de su habitación
No es de extrañar que la habitación del autor esté llena de carteles alusivos
No escuches las voces de los amigos muertos, Gaspar
NUEVAS URBANIZACIONES, PESADILLA
Oh, haber bebido miel en donde nació Sor Juana Inés
OTRO AMANECER EN EL CAMPING ESTRELLA DE MAR
Para acercarse a la desconocida es necesario dejar de ser el hombre invisible
Paris rue des Eaux Dijo que la poesía
¿Por qué la noche nos encuentra
PRIMAVERA DE 1980. PARA RANDY WESTON
Qué decir sobre los crepúsculos ahogados de Barcelona. ¿Recordáis
¿Qué estará haciendo Mario en México?
¿Qué haces en esta ciudad donde eres pobre y desconocido?
Qué se siente, dime qué se siente
Quién sostuvo en la siniestra el corazón negro de la muerte
Quiero decir: allí está Giorgio Fox
Quisiera escribir cosas divertidas para ti
Raro oficio gratuito Ir perdiendo el pelo
Recuerdo que Platón me lo decía
Recurrente, la desconocida cuelga del caleidoscopio
Salí de la última función a las calles vacías. El esqueleto
Se turba el pinche Roberto Cierra los ojos
Servía para la química, para la química pura
Si miramos con rayos X la casa del paciente
Sólo deseo escribir sobre las mujeres
Sólo la radio cruza el silencio
Soñé con detectives helados, detectives latinoamericanos
Soñé con detectives perdidos en la ciudad oscura
Soy una cama que no hace ruidos una cama a la una
Sudamericano en tierra de godos
Suerte para quienes recibieron dones oscuros
Tal vez no ame a nadie en particular, dijo
¿Te acuerdas del Triunfo de Alejandro Magno, de Gustave Moreau?
Te alejarás de ese coño sangrante
Te regalaré un abismo (dijo ella)
Te visitan en la hora más oscura
Todo de pronto existe entre las verduras y las moscas
Todo de pronto existe más allá del ojo azorado
Todo ha terminado, dice la voz del sueño, y ahora eres el reflejo
Todo me lo tengo merecido, patrón, no prenda la luz
Todos los comercios hoy estaban cerrados
Trabajaba en la Guerrero, a pocas calles de la casa de Julián
Trabajé 16 horas en el camping y a las 8
Un niño es el árbol de la Revolución
Un poeta chino piensa alrededor
Un Tao... Un Tao... Nuestro pequeño Darío
Una estela de enfermeras emprenden el regreso a casa. Protegido
Una muchacha con libras irlandesas
Una persona —debería decir una desconocida— que te acaricia
Una persona te acaricia, te hace bromas
Vete al infierno, Roberto, y recuerda que ya nunca más
Vi a Mario Santiago y Orlando Guillén
Vienen danzando por la colina el Loro que habla
Vimos a una mujer morena construir el acantilado
Ya que estamos aquí aprendamos algo