Ahora me acuerdo de los gatos de mi casa
Alguna vez (era seguro) íbamos a encontrarnos
Amante de la Muerte, enamorado feliz
Brillantes son las avenidas de la noche
Con un ligero impulso la palanca palpita
El cuerpo envuelto en un gabán azul, muy ancho
El sol de Palermo después de tantos viajes
EMBLEMA SOBRE UN TÓPICO ANTIGUO
En una roca agreste junto al río
Era un chico con ojeras moradas
Eran años de estudio. Sabía muchos de linguales
Me busqué y me rebusqué a mí mismo (Heráclito)
Me gustaría invitarte una noche (y aún lo espero)
Me recreo ante tu cuerpo como ante un paisaje
¿Merecerá la pena tanta búsqueda inútil?
Mucho más triste que la muerte odiosa
¿No has pensado en que todo atardezca?
Perder es el gesto más noble de la vida
¿QUÉ SABES DE LA NOCHE, CENTINELA?
Tan destruido como elegante, señor
Tú que aspirabas a vivir continua diferencia
UNA FOTO DE EZRA POUND EN VENECIA. 1968
Vivir sin hacer nada. Cuidar lo que no importa
Y abriría la puerta y tú estarías allí