Manuel Acuña (1849-1873)
Menú de poemas por TÍTULO y primer verso
A LA EMINENTE ACTRIZ SALVADORA CAYRÓN
A LA SOCIEDAD FILOIÁTRICA EN SU INSTALACIÓN
A ti, niña, la voz del sentimiento
«¡Allá!» se dijo, y extendiendo al aire
Allá va... como un átomo perdido
¡Amar a una mujer, sentir su aliento
Aún era yo muy niño, cuando un día
CINERARIA ANTE EL CADÁVER DE LA SRA. LUZ PRESA
Como decir veinte años es lo mismo
Cuando a su nido vuela el ave pasajera
Cuando la aurora enciende las montañas
Cuando todo era flores tu camino
Cuando tu broche apenas se entreabría
De los tres cielos que recorre el hombre
Después de aquella página sombría
Dormía el mundo la siesta de los siglos
EN EL TERCER ANIVERSARIO DE LA SOCIEDAD FILOIÁTRICA Y DE BENEFICENCIA
En este campo do el placer rebosa
EN LA APOTEOSIS DEL ACTOR MERCED MORALES
Entre el canto primero y el segundo
Ese era el cuadro que, al romper la noche
Esta hoja arrebatada a una corona
HIMNO A LA SOCIEDAD FILOIÁTRICA
Jamás pensé al venir a estas regiones
LA GLORIA. PEQUEÑO POEMA EN DOS CANTOS. CANTO PRIMERO. LA CABEZA SIN CORONA
LÁGRIMAS A LA MEMORIA DE MI PADRE
LETRILLA A MI AMIGO DON GREGORIO URIBE
Mentira el ¡más allá! ¡Mentira el alma
Mire usted, Asunción: aunque algún ángel
ODA A LA MEMORIA DEL EMINENTE NATURALISTA EL DOCTOR LEONARDO OLIVA
ODA ANTE EL CADÁVER DEL DR. JOSÉ B. DE VILLAGRÁN
¡Oh, tú que a la llegada de mi santo
Página en que la esfinge de la muerte
Pensando las quinientas unidades
¿Por qué te miro así tan abatida
Porque dejaste el mundo de dolores
Pueblo: tú que prorrumpes en gigantes
¡Pues bien!, yo necesito decirte que te adoro
Pues que en tu cielo aún brilla
Pues, señor, dije yo, ya que es preciso
Sabiendo, como sé, que en esta vida
¿Se acuerda usted de Juan, de aquel muchacho
Si la vida es un cielo, y si la muerte
Si llega a tu ventana una paloma
Sombras gigantes de Scipión y Ciro
Sonaron las campanas de Dolores
SONETO A MI QUERIDO AMIGO VICENTE FUENTES
SONETO A MI QUERIDO AMIGO Y MAESTRO MANUEL DOMÍNGUEZ
¡Y bien! Aquí estás ya..., sobre la plancha
¿Y qué? ¿Será posible que nosotros
Yo no sé si el señor Horacio Flaco
Yo te lo digo, Laura... quien encierra