DESDE LEJOS
Hoy te quiero cantar, y es porque quiero
que sepas que mi amor es un tesoro:
¡sin empuñar el pico del minero,
te voy a descubrir un filón de oro!
¡Si no supiese yo que en la cabeza
tienes luz, tanta luz como en el pecho,
no me atreviese a hablar de tu belleza
y a decir que mi amor es un derecho!
Tú sabes, cual yo sé, que los doctores
del dogma del amor, toman a ultraje
pensar que mude el corazón de amores
como mudan las aves de plumaje.
José Santos Chocano