SOBRE UN LEÑO
Morir y renacer es mi ejercicio
en el sabio deleite del oficio.
Amor universal mi paso guía
en bosque, llano, noche y mediodía.
Velo con Sirio, duermo con la sombra,
y en su aleluya me sonrisa nombra,
a la hierba que ayer hubo nacido,
al lúcido cabrito amanecido,
al desvelo del alba, a la primera
centella o sol que hiere o que me alumbra,
a la amorosa fuerza que me encumbra,
al combo cielo y tierra de la era,
a este jardín secreto de mi ensueño
sólo rico de orquídeas sobre un leño.
Juana de Ibarbourou