SONETO X
En una sobre el mar caída roca,
que un monte, de las ondas carcomido,
había de su cumbre sacudido,
mucho aviso escondiendo en ruina poca,
Daliso estaba una esperanza loca
repitiendo del mar al sordo oído,
que al duro son del llanto enternecido,
apenas sin temor la arena toca.
«Si de un monte no es firme aun la espera,
¿quién en la fe de una fortuna fía?
dice una y otra vez con duro aliento;
»Si a esta roca aun la ruina alcanza,
¿en qué se funda la esperanza mía?
en qué, si nunca tarda el escarmiento».
Francisco de Trillo y Figueroa