PIES LIMEÑOS
Tus pies son hechos sólo para lucir las galas
de un baile en salón regio o artística floresta,
para tejer gavotas al son de blanda orquesta
y para deslizarse cual si tuviesen alas.
Yo, esclavamente, sigo tus huellas. Tú resbalas
como un perfume vago; y en tu actitud apuesta
hay algo de otros siglos y hay algo de otra fiesta,
en otro jardín viejo o en otras viejas salas.
Tus pies, tus pies que evocan un baile voluptuoso
en las galanas noches de algún Virrey ardiente,
encelan mis deseos y angustian mi reposo;
y, así, con un estuche de los que te has calzado,
me haré una relojera para el reloj que cuente
las horas que transcurran distantes de tu lado...
José Santos Chocano