¡ELLA ME AMA!
¡Ser de un golpe feliz! ¡oh! ¡no es un sueño!
Frenético de amor por ella estar
¡Y ella amarme también! ¡y yo ser dueño
Del corazón que ansiaba conquistar!...
¡Así! ¡con una voz! ¡en un momento
Realizar cuanto cabe en la ilusión!
¡Abrazar cuanto abarca el pensamiento!
¡De dicha estar saciado el corazón!
No aspiraba yo a tanto: es demasiado.
Ya ¿que puedo anhelar? ¡morir así!
¡Bendita seas! me has reconciliado
Con la dicha a que ajeno me creí.
Bogotá, junio 13: 1852.
Rafael Pombo