EL MARCO DE ORO
Puesta en venduta cierta galería,
Todo el concurso se burlaba en coro
De un mamarracho garrafal que había
Entre un marco magnífico de oro.
Llega un ricote Aquello lo extasía;
Sácanselo a pregón, brinda un tesoro,
Y adjudícase el hueso al mentecato.
—¡Va! siempre el tonto adora su retrato.
Noviembre 8: 1870.
Rafael Pombo