XI
Tú estabas entre músicas y trajes
definida en tu fuga y en tus gestos;
mitad por la planicie de la ausencia,
mitad por las vertientes de tu cuerpo.
Mas nadie presentía que yo estaba
bajo el arco de río de tus sienes,
ni en el quicio gentil de tu palabra,
ni en la viva cornisa de tu frente.
Nadie lo presentía. Y sin embargo
tu amistad se miraba en mis espejos.
Y de su mate surtidor brotaron
los chorros de distancia del recuerdo.
2 de julio de 1942
Pedro García Cabrera