DEL ARCHIVO DEL MUNDO
... leones y ángeles, águilas y toros golpean y sacuden los arcos planetarios,
y el mundo, cual robot noctámbulo, cae rodando bajo una mota de luz divina,
de la que Moby Dick huye, y a la que en Ahab odia y teme;
... buscándola, roto y loco miro y miro al interior y no me veo, no me encuentro el alma;
sucede tras rompérseme las cadenas de los huesos, las de la vida, las del deseo,
y no tengo valor para entrarme dentro y una a una, a fuerza de lágrimas y sangre restaurarlas;
... sé que debiera sentir responsabilidad en la salvación urgente que implica tal destrozo,
que debería bajar a mi propio infierno y rescatar las crueles muertes con que ajusté
mis anteriores, mis pútridas y herrumbrosas vidas;
pero si bien es cierto que el pasado me tiene en sus argollas, mientras, y derribando mis sueños
de oropel, atropellándome, enfurecidos me están pasando águilas y toros por encima;
... oh mar de conquista y fuego, luz celeste y viva aún, fuerzas moribundas que estáis yéndoos
de mis templos caídos y humeantes, deteneos, retroceded y volved conmigo, que me levantaré
y de nuevo estaré listo para luchar con ardor contra mis costras y furias;
sólo esa guerra podría hacer que reviviese, sólo, sólo ella quizá pudiese restituirme a la alegría.
Orión de Panthoseas