HELENA
Griega en apariencia,
tu nombre a mi memoria
evoca pasadas épocas,
no diré que mejores,
porque si me olvido de tu nombre
y en tu realidad mi ojos
se fijan, que mejor momento,
sino este, tocar vivir me pudo.
Y no solo eso,
a cada paso que das,
como el sol en las mañana
se abren las flores,
como si fueras la mecha
que enciende la pólvora,
y tras esa explosión, tu belleza.
Y ahora pienso, como pude estar mudo,
tan largo tiempo, ante tamaña evidencia,
espero, que esta vez la musa
no se vengue de quien abusa del verso.
Felipe Evaristo Gómez Pescador