ARRIANDO
Voy desgranando amor,
entre mis manos;
como si fuera trigo, ya maduro;
y quedan tan solo, tristezas
sueños vanos...
y esperanzas, que mi alma,
nunca tuvo...
Voy llevando alforjas de ilusiones
en los lomos, cansados de mis sueños.
Voy andando... ¡Camino de la vida!
para olvidar el ayer... ¡Qué vano empeño!
Se van quedando tristezas desleídas,
con mansedumbre de inútiles quimeras.
Y se me va la vida entre las manos
Y mi alma...¡mi pobre alma!
¡Siempre espera!...
Y yo, que voy dejando amor
entre mis manos,
como si fuera trigo, bien maduro
voy desgranando sueños,
sueños vanos,
en mi alma, que amores...
...nunca tuvo...!
Cristina De Fercey