TRIOLET
Suspira, oh corazón, tan silencioso
que nadie sienta el eco del suspiro.
Por no turbar los sueños del dichoso,
suspira, oh corazón, tan silencioso.
Fingiendo la alegría y el reposo,
en la quietud y sombra de un retiro,
suspira, oh corazón, tan silencioso
que nadie sienta el eco del suspiro.
Manuel González Prada