ERNESTO RENÁN
Como el rapaz que cabalgar anhela
Hace corcel de un tronco, espuela dura
Calza, sube animoso, se asegura,
Y en fantasía por los campos vuela;
Renán que con la idea se desvela
De vender a Jesús, a la impostura
Llama, y con barro oscuro la figura
Del Hombre-Dios, sacrilego modela.
Piensa en fin que encerrado allí le tiene,
Mírale iluso, y, "Desta añeja carga",
Dice, "a los hombres libertar conviene".
Vuelve los ojos a su vil cuadrilla,
Y al busto informe con sonrisa amarga
¡Beso traidor le estampa en la mejilla!
Miguel Antonio Caro