CELOS
Preguntábase inocente
Una flor con triste calma:
«¿Qué es lo que siento en el alma?»
—«Celos», le dijo una fuente.
Inclinó la flor su frente
Y lloró amargos recelos.
Después, mirando a los cielos,
Exclamó con voz sentida:
—«Si me da el amor la vida,
¿Por qué me matan los celos?»
Octubre, 1849
José Selgas y Carrasco