DESMONTE
El árbol respira noche. Se puede oír
la savia de la oscuridad perpetuándose
en su aislamiento que se romperá. Dondequiera
yacen los grandes troncos carbonizados.
La selva restaurará en su territorio al desierto.
La tribu errante
no tiene otra comida que el maíz. Para cultivarlo
torna en ceniza su gran bosque sagrado.
Quinientos años duró el árbol. Quinientos años
lleva la noche de caer sobre México.
José Emilio Pacheco