AMANECE EN EL MUNDO
Desciende el tartamudo silencio de mi patria
Las fechorías cantan un aria de escorpiones
La Bolsa de Valores ha cotizado la mano del hombre
A las tres suena el timbre y baja el odio
cantado por sirenas
Oh señores los microscopios más potentes
aún no han podido descubriros
Cuánto esfuerzo de vuestra bondad para ser malos
Nuestras despensas tienen oídos sofocantes
Según me cuentan los más viejos siempre ha sido así
mucho antes del fuego o del antiguo testamento
Cuando llegué a la vida
había ya empezado la batalla
Los diarios trajeron el resplandor
de la primera bomba nuclear
Espantosas las fotos, espantosos los rostros tan humanos
Mujeres de rodillas en medio de las calles
con sus bocas sin dientes y la mueca violeta
El humo sigue la dirección del viento
y yo crecí
Oh señores del Orden, respetables Señores
han tomado mis ojos como rehenes
pero aún veo
Han dado en vuestras máquinas al tiempo
su condición de tuerca
Aun así
el viento es un pájaro en el árbol
se enternece la tierra, desaprueba la muerte
Amamos nuestro siglo como un padre a su hijo
Alcohol de la vigilia
Amos del odio
Engranaje mascado por la usura
Aún nos llega el calor de los hornos crematorios
Vuestro reino muere en la sombra
bajo el peso de este amor
Y aquí nuestro planeta
de intenso azul visto desde el espacio
lenta naranja de metal desnudo
ariete en el silencio inevitable de nuestros astros
Atrás, prisiones, tumbas,
los muertos de Hiroshima hacen girar la Tierra
Callad, callad, va a dar a luz la sombra
Oh paz hermana que cose la vida al corazón
Atrás, prisiones, tumbas
Desde mi patria acechada confío en los hombres
Es inminente el nacimiento del alba
Juan Bañuelos