TRADUCCIÓN DE ANATOLE FRANCE
SOBRE UNA FIRMA DE MARÍA ESTUARDO
Esta reliquia exhala perfume de elegía,
Porque la reina Estuardo, de labio purpurino,
Que a Ronsard recitaba y el misal, un divino
Hálito aquí ha dejado de magia y poesía.
La hermosa reina rubia, con frágil energía,
Firmó María abajo del viejo pergamino.
Aquí posó la mano, lirio adorado y fino,
Que azulaba una sangre fiera y pronta a la orgía.
Fijáronse aquí dedos de mujer, impregnados
En olor de cabellos, por ella acariciados
En el real orgullo de un sangriento adulterio.
y aspiro la fragancia, y veo los rosados
Tintes de aquellos dedos, hoy mudos, y trocados
Quizá en pálidas flores de triste cementerio.
Ismael Enrique Arciniegas