ROSA DEL VIENTO
Surgirá el corazón de su aislamiento.
Y ese alto corazón no será mío.
Solitaria la sangre, como un río
se volverá a su oscuro nacimiento.
Limitaré la sombra y el momento
de la luz cubrirá tanto vacío.
Semejante a los cánticos de estío,
la palabra será rosa del viento.
Los actos de la fuerza y de la vida,
coronaré de paz. Mi planta inerte
caminará por fin hacia la ausencia.
Descansaré en la calma conseguida,
y a los helados bosques de la muerte
irá a esconder su angustia mi presencia.
Germán Pardo García