SONETO IX
Breves pasos, que al pie flaco y cansado
Sois de largo dolor áspera vía,
Por la triste memoria de aquel día,
Que mi más claro sol hizo nublado:
Si desdén fiero en corazón trocado
Cuando más viva y verde florecía
Mi esperanza esparciendo escura y fría
Niebla, la ha seca y sin vigor dejado:
Y en el menor de vos mil sombras veo
De mi gloria al primer punto perdida,
Bien es razón que os riegue con mi llanto
Volvedme, si podéis, mi usado canto,
O llevadme con él junto el deseo,
La memoria, los ojos, o la vida.
Francisco de Figueroa