RESPONSO POR RUBÉN DARÍO
Buey que vi en mi niñez
echando vaho un día Amigo,
el tiempo que no cree en nosotros
nos lleva el pan, el corazón y el día
como a las nadas del otoño muerto.
¿Qué sabe acaso de tu fiel Francisca,
de tu chaleco decadente, pulcro
entre las sedas del suburbio ambiguo?
Como por juego, distraídamente,
nos echa encima el polvo que levanta
cegándonos las ganas de la vida.
Eliseo Diego