PARA LAS RUINAS DE MI CASA
¡Oh corrupción, oh bruja
de cabellos canos!
Tú roes
sin prisa tu pedazo
de madera oscura, tu parte
de consuelo,
a solas
en el vacío de la puerta.
¡Jardín
de mi padre, laureles!
A solas
en el vacío de la puerta.
Eliseo Diego