FINAL
En el postrer paseo,
sentados,
a cielo abierto y solos,
con pensamiento y mano.
Luz difusa en la hora
última,
de cosas que, si han sido,
se tornan paso
a paso.
Aldea ya disuelta.
Ausencia de miradas
que vuelan de la torre
por el cielo,
en una ida sin fin.
Palabra sola que pende
del alambre,
en el camino, suelta.
Dulce fiesta de paz en el crepúsculo,
dulce fiesta que afuera
se mira entre la vida,
entre el céfiro blando,
cara a la primavera.
Vicente Aleixandre