EL DERRUMBAMIENTO
SEGUNDA PARTE
CUADRO FINAL
Juan Santos Ataualpa lanzó el grito
de rebelión: crujieron las cabañas.
Su voz, repercutiendo en lo infinito,
era la libertad de las montañas.
Tal fue el derrumbamiento portentoso
de una sobre otra raza... Hecho un coloso,
él, Apú-Inca, que en el campo abierto,
se rubricó de heroicas cicatrices,
supo en la lucha desplomarse muerto
como un árbol hachado en las raíces.
Y cumplió su deseo, y murió ufano;
que, on las montañas a su empuje estrechas,
él, antes de morir, tuvo en su mano
todas las tribus como un haz de flechas.
José Santos Chocano