EL SUEÑO DEL AGUA
El agua se torna risueña
al soplo de un aura de amor,
y rompe en espumas, y sueña
galanas praderas en flor;
EL castaño y el chopo floridos
al beso amoroso de abril,
y llenos de cantos y nidos;
el sol en el campo gentil;
Y amante pareja: la niña
más rubia que espiga de mies,
luz, flor de amena campiña,—
el mozo, un Don Juan holandés.
La verde llanura, el molino;
los bueyes cansados de arar;
y en ancas de un potro argentino;
un ave que rompe a cantar.
El agua en el tiempo de frío
apura su copa de hiel,
y sueña un paisaje de estío
del gran Salomón Ruysdael.
1908.
Rufino Blanco Fombona