ALONDRA DE LA HOJITA VERDE EN EL RÍO
A Angustias y Pepe
Caracol de la rama,
voz de lo verde,
por las aguas abajo
se van tus sienes.
Trábalas de un remanso
de la corriente,
que hasta amarga en los mares
la dulce nieve.
Date prisa, lucero,
que si te duermes
no encontrarás al alba
tus cascabeles.
Corazón de las aguas,
ramos de fuentes,
dejadme las luneras
que hay en mis sienes.
Una ovejita blanca
como la nieve
moriría de pena
si no me viese.
Caminito del agua,
anda y detente,
que en los mares se ahogan
los sueños verdes.
No me llevéis más lejos
por la corriente,
que es el día muy corto
y el paso, breve.
Déjame en la ramita
que cuelga enfrente,
prendidita en los juncos
con alfileres.
No me beses tan hondo,
boca de mieles,
capullito del agua,
luz de mi frente.
Que si me paso toda
la tarde ausente,
murmurarán las otras
ramitas verdes.
Pedro García Cabrera