ENCADENADOS
Mira como llegan desde el horizonte
filas de encapuchados
desplazándose al compás de percusión
de pieles tirantes
mira como corren despavoridos
maldiciendo nuestra suerte
y tiemblan las balas ante el poema esculpido
en la piedra fundamental.
Cadáver explícito.
Mira como ríen los novios
¿tendrán motivos?
Frente al espejo realidad plateada
deforma el anillo-cadena
ella se descalza
corre el cierre
cae el vestido
y se ofrece en la cama-altar
mientras en su cabeza
resuena
la hipócrita frase del cura
"hasta que la muerte los separe"
"morir es una buena cosa", piensa
y se deja caer sobre la cama-altar.
Nelson Díaz