SABÍA, AMOR MÍO, LO QUE ERA PERDERTE
Sabía, amor mío, lo que era perderte,
perderte como el que pierde el mar,
o como el pájaro pierde su vuelo,
o su belleza,
perderte era la opción perfecta,
sin distinciones, sin enojo, ni llanto,
era una realidad más otra, la de tu
risa, simbólica distancia, tan pequeña,
que se expresaba tan solo en el olvido,
perderte era una rosa que moría,
en el silencio triste de tus labios.
Juan Miguel Melgar Becerra