DÍA DE LA COLOMBIANIDAD
¡Veinte de julio! Día de la hermandad,
de valores, de ideales, de sueños e ilusiones
de un pueblo honesto que ama la libertad
sin secuestros, sin masacres ni extorsiones.
Día majestuoso de inmenso patriotismo
de luchadores con honor sobre la frente
que buscan el bien común con altruismo
hasta alcanzar con fe la gloria reverente.
Día de luz con rayos rutilantes de unión
que deshelan la inteligencia congelada
para cambiar por el destello de la razón
los fusiles que están bajo la almohada.
Hoy en las entrañas de esta patria mía
se siente un gran temblor en la mañana
y estalla de pasión con lava de alegría
como un volcán la sangre colombiana.
Hoy los grillos y las cadenas del villano,
atadas con saña y crueldad al prisionero,
con el grito valiente del pueblo soberano,
se romperán como aquel frágil florero.
¡No más barbarie, terrorismo y vejación!
contra un pueblo desarmado e indefenso;
¡No más dolor en la aldea y en la nación!
que retarda el desarrollo y el progreso.
¡Libertad! ¡Libertad! ¡Oh cruel tirano!
que siembra minas en surco de dolores
para opacar el brillo del sol republicano
que hizo germinar las semillas y las flores.
Héctor José Corredor Cuervo