SONETO V
El Segmento Lapidario
Disparada en el eje cartesiano,
donde nacen y mueren los conjuntos,
una recta, acotada entre dos puntos,
debate su existencia sobre el plano.
Sobre la abscisa el gran Dios soberano
¡principio y fin de los todos los asuntos!
va mostrando a sus pares ya difuntos
cuánto universo cabe en cada mano.
Y atribulado, el hombre, de tamaña
demostración de fuerza, se despierta
entre la duda, el eje y su legaña.
¡El segmento es apenas un alerta
que lapidariamente nos araña
y nos anuncia donde está la puerta!
Alí Al Haded