ZUPAY
«Zupay, que quiere decir Diablo».
Garcilaso
I
Hacia los muros del naciente Cuzco
avanza Manco ....................................
Zupay asoma, y ....................................
el paso a Manco cierra.
—«Escucha, oh Manco, adórame sumiso,
al Sol falaz y engañador desdeña;
que yo grandezas te daré y, honores
y el reino de la Tierra...»
Manco, impasible, sin mover los labios,
la honda de oro cauteloso apresta,
y al pecho altivo de Zupay arroja
abrumadora piedra.
Huye Zupay, lanzando
una furiosa queja,
y a la estirpe del Inca
jura implacable guerra.
Mueve Zupay el labio:
rompe el humilde río sus riberas,
y, transformado en bramador torrente,
asola el campo y la ciudad aniega.
Mueve Zupay el labio:
troncha el maíz la empenachada cresta,
y el negro insecto y la nocturna helada
estrago y muerte en la campiña siembran.
Mueve Zupay el labio:
el truculento terremoto truena,
y templos y moradas se desploman
y el mar asalta con furor la tierra.
Triunfa Zupay y goza; mas un día
levanta el Sol la prepotente diestra,
y el Dios del mal, acobardado, mudo
corre y se oculta en tenebrosa cueva.
Manuel González Prada