CANON DE HUMILDAD
Es hilo de agua pura brotando de la roca
La inspiración. No tuerzas su curso espiritual.
Enturbiarás su linfa, si tu mano la toca,
Queriendo hacer torrente del claro manantial.
Con pincelada breve, vasto paisaje evoca;
Naturaleza tiene pudores de cristal...
Bridas de blanca seda unce a la rima loca.
Haz de tu verso un canto de alondra matinal.
Pide a la flor su aroma y a la vida sus sueños;
Alza enormes Alhambras de arabescos pequeños;
Arranca el oro virgen de tu mundo interior;
Ilumina los antros de tu vana miseria;
Despierta el alma oscura dormida en la materia.
Y en todo abismo enciende sereno resplandor.
Leopoldo Díaz