LA IMAGEN
Halcones y ventanas
Mi madre cierra,
Que mi madre no quiere
Que yo te vea;
Y es que no sabe
Que en el fondo del alma
Llevo tu imagen.
Entra por las junturas
De mi ventana
La claridad suave
Que enciende el alba;
Y yo al sentirla
Despierto, y me parece
Que tú me miras.
No pases por debajo
De mis balcones,
Que mi madre no quiere
Que yo me asome;
Pero ya sabes
Que en el fondo del alma
Llevo tu imagen.
El sol ardiente y puro,
Risueño y claro,
Entra por mis ventanas,
Baña mi cuarto
Canto de gozo,
Que es tu amor el que llena
De luz mis ojos.
Balcones y ventanas
Mi madre cierra,
Que mi madre no quiere
Que yo te vea
Porque no sabe
Que en el fondo del alma
Llevo tu imagen.
Un álamo gallardo
Da sombra al huerto,
Y en sus inquietas ramas
Suspira el viento;
Presto el oído,
Y escucho el eco dulce
De tus suspiros.
No pases por debajo
De mis balcones,
Que mi madre no quiere
Que yo me asome;
Pero tú sabes
Que en el fondo del alma
Llevo tu imagen.
Al pie de los rosales,
Formando espuma,
Corre el agua ligera,
Salta y murmura;
Yo al escucharla
Oigo el tierno murmullo
De tus palabras.
Balcones y ventanas
Mi madre cierra,
Que mi madre no quiere
Que yo te vea;
Y es que no sabe
Que en el fondo del alma
Llevo tu imagen.
En las cumbres lejanas—
La tarde muere,
Y la noche tranquila
Su sombra tiende;
Pero ¿qué importa,
Si yo por todas partes
Veo tu sombra?
No pases por debajo
De mis balcones,
Que mi madre no quiere
Que yo me asome;
Pero bien sabes
Que en el fondo del alma
Llevo tu imagen.
José Selgas y Carrasco