LA HORTENSIA Y LA MADRESELVA
La madreselva.
La dulce frente inclinada,
Sin color y sin esencia...
¡Pobre flor desconsolada!
Tú vives enamorada,
Y sufres males de ausencia.
Lloras tu amante perdido,
Y es inútil tal desvelo;
Tierno corazón herido,
Para encontrar el consuelo
Necesitas el olvido.
La hortensia.
Si no llorara a mi amante
Perdiendo color y esencia,
No fuera mi amor bastante;
Yo lo siento más constante,
Con el rigor de la ausencia.
Tres auroras han nacido
Desde que le lloro ausente.
Yo no sé lo que he sufrido...
La palidez de mi frente
Podrá decir si le olvido.
La madreselva.
Tu padecer es bastante
Yo calmaré tu dolor.
Espera, flor, a tu amante:
Que si tú eres tan constante,
Yo tengo lazos de amor.
22 Abril, 1850.
José Selgas y Carrasco