LA COMPARSA
Allí van sobre el hielo las figurantas
sepultando en la bruma su para
nieve,y el automóvil rueda con finas llantas,
y los ojos se exponen al viento aleve.
Allí están con la risa multicolora
cascabeles felices de la locura,
y al poniente fluctúa luz incolora,
y los méganos ciñe la nieve obscura.
Así pasan los bellos, claros semblantes
a la luna del alma, la luna muerta;
las que vimos festivas formas galantes
se pierden en las luces del alba incierta.
La amarilla corneja llora en la nieve
y en un sueño fenece su grito alado;
hoy seguir la comparsa nadie se atreve;
porque aquella alegría no ha regresado.
José María Eguren