SUCESOR DE ASESINO
Como quien rasga, como
quien deja un gran rastro de andrajos
sobre el martirizado cuerpo
de la víctima, como quien solicita
un nuevo plazo punitivo,
así se perpetúa
en los anales de la sinrazón
la ominosa progenie
de aquel que fue llamado el execrable
y aun hoy actúa entre nosotros
con saña vitalicia y una misma
dinástica jactancia de asesino.
José Manuel Caballero Bonald