EL BAJO MAGDALENA
II
MEDIO DÍA
Polvo, cansancio y sol. Y un torbellino
De polvo, y otro.... y otro de contino
En la aridez desierta del camino.
De la montaña en el oscuro flanco,
Junto al río, a la luz radia un barranco
De color ocre. El cielo es casi blanco.
Tronco erecto, sin hojas, como una asta
Corta el confín. Y en la llanura vasta
El sol refulge, y el rebaño pasta.
Ismael Enrique Arciniegas