EL INSOMNIO COMIENZA EN LA CUNA
A Cloe
El insomnio comienza en la cuna.
Recién despierto de la eternidad
el hombre no tiene sueño
ni ganas de dormir;
rodeado de tanta vida que no ha visto,
abre los ojos para mirar la luz
al borde de sus manos.
El insomnio sigue toda la vida;
el hombre,
deslumbrado por tanta aurora
al borde de las cosas,
no quiere cerrar los ojos
por miedo a quedarse ciego
o a ya no abrirlos nunca.
El insomnio continúa en la tumba.
París, lunes 11 de noviembre de 1991
Homero Aridjis