Las voces que soplaron en el aire
formaron en el aire una ciudad
las lluvias que subieron y bajaron
formaron en los lagos nubes de cristal
los sonidos que siguieron caminos cardinales
llevaron ruiseñores y sueños y olas hasta Dios
y los que no yacieron en hogares del viento
cantando se apagaron en sus nidos veloces
los colores que cayeron rojos y amarillos
salieron de adentro y de afuera de las cosas
pintaron el puente la pradera y el páramo
con su tiempo su alma y su temperatura
los pájaros que volaron de las voces
hicieron un techo de alas y de azul
los nueve frutos en los que los colores se metieron
fueron vírgenes musas y virtudes
y los sonidos los colores las virtudes
formaron en el aire una ciudad
Homero Aridjis