EL CUADRO DE ZEUXIS
Sobre losas de pórfido camina
una frondosa vid; el sol de Oriente
los racimos de púrpura luciente
y los húmedos tallos ilumina.
El brillo de las hojas, la divina
locura de los ramos, dulcemente
suspiran por el mármol de una frente
y las jónicas ánforas de encina.
Vierte aromas tu vivida pintura,
toda miel, toda luz. ¡Cómo fulgura
esa viña de pámpanos hojosos
do —cautiva de ingenios soberano—
pica las uvas que trazó tu mano
una banda de pájaros golosos!
Guillermo Valencia