JUGUETES PARA NIÑOS
—¡Dame esa figurilla niquelada
que a lo lejos esplende en el erío!
—¡No es un juguete fúlgido, hijo mío!
¡Es una división mecanizada!
—¡Madre solar: procúrame esa espada!
¡Quiero lucirla con orgullo y brío!
—¡No la toques jamás! Un hondo frío
se esconde en su hermosura envenenada!
—¡Regálame esa flor azul y roja
que allá sobre los montes se deshoja!
¡Parece un hongo, un cáliz encendido!
—¡No mires nunca más esas montañas
y vuélvete a la cruz de mis entrañas
a expiar algún rencor desconocido!
Germán Pardo García