EN EL ÁLBUM DE UNA SEÑORITA
Dícenme, niña,
Que eres tan bella,
Que si en aquella
Pasada edad
Nacido hubieses
De Grecia clara,
Que culto y ara
Dio a la beldad;
Del hijo propio
Desconocida
Venus corrida
Tornara al mar,
Y do quier fuera
Del orbe inmenso
Por ti el incienso
Y a ti el altar.
Gertrudis Gómez de Avellaneda