EL COTORRO DE CASCORRO
El cotorro de Cascorro
nació en Madrid,
hijo de una cotorra
de Guayaquil.
La dueña del cotorro
de Cascorro
le cortó las uñas
y le hizo un gorro.
El cotorro de Cascorro
era de lo que no hay,
decía:
Contra lo «chungo»
lo «guay».
Contra lo «chungo»
lo «guay».
Así lo dijo,
porque era más chulo
que un botijo.
Cuando llegó a mayor
le metieron una cotorra
en la jaula.
El cotorro feliz dijo:
—Tengo una alumna en el aula.
La cotorra por la jaula
trepa que trepa.
Y el cotorro recitando:
—¡Viva la Pepa! ¡Viva la Pepa!
Gloria Fuertes