CANCIÓN DEL RECUERDO
IV
Ante la Virgen que adorabas tanto
rezaba con tan ciega idolatría,
que entre mis labios la oración moría
estrangulada por mi propio llanto.
La imagen, impasible a mi quebranto,
con sus labios pintados sonreía
a un Niño que en los brazos sosteía
medio oculto en los pliegues de su manto.
—¡Mi vida en cambio de la suya!—dije.
Ciego de pena y de terror, maldije;
y al salir de la brusca pesadailla,
vi en la faz de la imagen, con espanto,
algunas gotas trémulas de llanto
rodar sobre el carmín de su mejilla.
Francisco Villaespesa
Incluido en Francisco Villaespesa. Poesías completas. Tomos I y II. Madrid. Editorial Aguilar. Colección Joyas. 1954.