LA ARTERIA ROTA
Como corre la sangre de la herida
Dejé correr en vano
El curso inútil de mi estéril vida.
Hoy , que exangüe me siento, a cada gota
Quisiera lo imposible, por mi mano
Ligar la arteria rota;
Vivir de nuevo modo la existencia,
Y no del que condeno
Cuando a solas pregunto a mi conciencia,
¿Fui sabio, he sido artista , he sido bueno?
1895
Francisco A. de Icaza