MI AURORA
Como un gran sol naciente iluminó mi vida
Y mi alma abrió a beberlo como una flor de aurora;
Amor! Amor! bendita la noche salvadora
En que llamó a mi puerta tu manita florida.
Mi alma vibró en la sombra como arpa sorprendida:
Las aguas del silencio ya abiertas, en la aurora
Cantó su voz potente misteriosa y sonora.
Mi alma lóbrega era una estrella dormida!
Hoy toda la esperanza que yo llorara muerta,
Surge a la vida alada del ave que despierta
Ebria de una alegría fuerte como el dolor;
Y todo luce y vibra, todo despierta y canta,
Como si el palio rosa de su luz viva y santa
Abriera sobre el mundo la aurora de mi amor.
Delmira Agustini