DEVINO MISTERIO
¿Cómo convertir en canto ese silencio
de la tarde fuera del monasterio, frente al mar?
En el pequeño malecón dos pescadores,
vueltos hacia sí, desempacan su cosecha de peces espejeantes.
¿Detener con las manos las imágenes mudas
que esperan contener nuestros cuerpos?
El viento pega contra el portal inmenso
pero de ello también hay silencio.
¿Vivir este tiempo al otro lado del tiempo?
Un monje pasa y entrebarbas escupe su
risa a los pescadores.
¿Restregar la memoria hasta donde
no lo quiso el recuerdo?
El mismo monje observa el espacio
que habito y sonríe cortésmente.
¿Dónde está el poema, entonces,
la mirada hacia adentro?
Armando Romero