SIGNOS EN LA PIEDRA
Sigue la senda de las piedras musgosas,
la que conduce a la gran roca,
a la raíz del ara, a la raíz del tiempo.
Mira la nieve humilde de la cima
tutelar.
Posa en ella tus ojos.
Luego pósalos en el ara.
Posa también tus manos:
que se aquieten tus manos como palomas,
que echen raíces
en el silencio helado de la piedra.
Verás en ella señales muy leves,
signos dictados por el firmamento,
los símbolos de un tiempo infinito
revelación del alma que no muera.
No podrás ir más allá.
No debes ir más allá.
Antonio Colinas
Transcripción del manuscrito de Carlota Oteo.
Poema de la Tertulia Literaria Hispanoamericana Rafael Montesinos.