A LA SOMBRA DE UN VIOLÍN PIENSO QUE SOY ANNE SOPHIE MUTTER
A esa liebre, como dijera Wittgenstein, la busco, la persigo
Al principio yo anhelaba ser el príncipe de la poesía, el rey
Al pronunciar tu nombre como un cuervo, graznar
¿Cuánta distancia existe entre tu muerte de escritor y un jardín
Entonces la corneja que me mira y yo siento tu voz en su discurso
He traído un pico y una pala para cavar un poema en la hoja
Un día imaginé que yo era Anny Bould
Veo una corneja que brilla sobre la rama de un abeto